Este trabajo reune información, imágenes, estadísticas y otros registros de los 10 años de existencia del Programa Iberescena, el Fondo de Ayudas para las Artes Escénicas Iberoamericanas.

Un recorrido por la historia de Iberescena

Al conmemorarse 10 años del Programa Iberescena, celebro primero que nada la iniciativa del Instituto Nacional del Teatro de Argentina por haber asumido tan importante tarea en la elaboración de este documento que será parte de la historia de las artes escénicas iberoamericanas. Argentina es testigo del crecimiento del Programa ya que su presencia ha sido constante desde el año 2007 cuando se realizó la I Reunión del Comité Intergubernamental de Iberescena en Venezuela. La posibilidad de tener un libro que recorra la historia del Programa es fundamental para todos los países, sus artistas y nuestra historia.

Iberescena es un espacio motivador y generador de proyectos para los artistas iberoamericanos que conforme pasan los años, se van integrando y conociendo mejor. Es una plataforma para la expresión escénica. Una plataforma que permite a los participantes explorar nuevos lenguajes e intercambiar conocimientos. La visión de sus fundadores es también motivo de celebración. Esos hombres y mujeres que en su momento visualizaron lo que hoy es una realidad: catorce países dialogando, conociéndose, creando desde el escenario, recopilando hoy 1.024 ayudas concedidas por un monto total de 10.377.350 €.

El Programa ha tenido notables aspectos de crecimiento, así como hay otros que siguen pendientes o se hacen necesarios cuando se alcanzan otras metas. A mi ingreso en la Dirección Ejecutiva del Teatro Popular Melico Salazar de Costa Rica y Punto Focal de Iberescena (2012), había 10 países firmantes. Se han ido realizando esfuerzos notables y hoy tenemos ya a 14 países y otros mostrando interés real de afiliación. Iberescena ha permitido a los países integrantes colocarse en el mapa teatral de la región y del mundo. Permite que se conozca cada vez más la realidad de cada país, su producción artística, logros y limitaciones.

Esta visibilidad es buena para todos pero para los países más pequeños y con dificultades de desarrollo es una extraordinaria ventana al mundo iberoamericano.

Desde la visión como Presidenta del Comité Intergubernamental puedo decir que en ese ámbito también el Programa es de suma importancia. Para los Puntos Focales, conocer las realidades de producción, políticas y desarrollo de las artes escénicas de cada uno de los países miembros del Programa y tener acceso a esa información, le permite a cada uno discernir las posibilidades reales de su sector. Coloca al país en un escalón “x” con la posibilidad de valorar caminos recorridos por otros y contextualizarlos para su propio beneficio, si así lo considera oportuno.

Iberescena ha sido un ganar-ganar a lo largo de estos diez años de desarrollo. Nuevos, y otros no tan nuevos desafíos, nos seguirán acompañando a lo largo del camino. Es un espacio en permanente construcción, rotación y revisión de sus logros y fracasos. Un espacio donde la gestión, la integración, el intercambio y la cooperación se dan la mano para recorrer ese camino, a veces incierto, de la creación escénica.

Construir en la diversidad

El inicio del siglo XXI está signado por movimientos de singular intensidad, que ostentan avances y retrocesos en la evolución de nuestras comunidades, en permanente contradicción. Las diferencias económicas y sociales amplían diariamente el distanciamiento, generan desigualdad y conducen, más frecuentemente a enfrentamientos, violencia, y más desigualdad que a procesos de trabajo colaborativo que respeten e incluyan la diversidad como campo de acción.

En este sentido, las expresiones de la cultura demuestran sin cesar, ser una de las maneras más inclusivas e innovadoras para alojar diferencias y construir desde la pluralidad, apostando por la tolerancia e incentivando la cooperación.

Tal es así que en la primera Cumbre Iberoamericana en 1991, se tomó al “acervo cultural común” como elemento constitutivo de lo que sería la Comunidad Iberoamericana.

Iberescena nació con el nuevo siglo y pugna, desde hace 10 años, por reunir, dialogar y construir colectivamente una escena que nos refleje, nos interpele y nos modifique. Invita al cruce, al reconocimiento, a la investigación, al desarrollo de otros, nuevos y mejores mundos. Porque, sin duda, imaginarnos nos permite evolucionar. Y pensarnos y actuar como pueblos hermanos en el contexto iberoamericano, nos esperanza.

Argentina ha integrado el Programa desde sus inicios. Durante estos años nuestro país ha sido un protagonista esencial, liderando el Comité Intergubernamental, haciendo aportes de singular importancia, y siendo anfitrión en múltiples reuniones. Todas han sido muestras del compromiso con el que asumimos la tarea y la ferviente voluntad de impulsar y desarrollar la cooperación internacional para nuestras artes escénicas.

Los 10 años de Iberescena son motivo de celebración, y constituyen un ejemplo de colaboración iberoamericana, dado que además el Programa ha sido pionero e inspirador de otros, de similares características, de los que nuestro país también es miembro.

Esta experiencia de cooperación iberoamericana ha permitido, sin lugar a duda, el acercamiento de creadores, gestores, productores, investigadores y técnicos de una región tan vasta como diversa. Innumerables colaboraciones que enriquecen nuestro acervo cultural y fortalecen la identidad nacional e iberoamericana.

Tenemos mucho que agradecerle al Programa. Este libro es otro aporte más a Iberescena, que como agradecimiento a los demás miembros y al Programa mismo es ofrecido por la Editorial INTeatro a Iberoamérica y al mundo, con el deseo de que el registro de lo compartido inspire nuevos y mejores intercambios en la región, en ésta y en otras áreas de la cultura.

En las páginas que siguen damos cuenta de lo hecho. Deseo que esta reunión de palabras e imágenes sea disparadora de nuevas ideas, de nuevos proyectos y nuevas ayudas para seguir comprendiendo que, aún en las diferencias, formamos parte de lo mismo.