El Foro El Cubo se engalana con la presentación de la obra Azul, del autor colombiano Diego Fernando Montoya Serna, escenificada por la compañía Mulato Teatro de México y bajo la dirección de Luciana Martuchelli de la Cia Yinspiração Poeticas Contemporâneas de Brasil. La temporada de esta coproducción será del 26 de agosto al 14 de octubre, los días lunes a las 20:30 horas, gracias al Fondo de Ayudas para las Artes Escénicas Iberoamericanas (IBERESCENA)

Las actrices Marisol Castillo y Fabrina Melón son las encargadas de transportarnos a las orillas de esas costas negras, donde la afrodescendencia palpita y construye resistencia para no caer en el olvido, aunque se deje la vida en el proceso. En una combinación perfecta las actrices, una colombiana nacionalizada mexicana, y la otra, originaria de Isla Guadalupe, residente permanente en México, nos cuentan la historia de Azul. La obra trata sobre una comunidad costera que tradicionalmente ha vivido de los recursos que la naturaleza provee y un comercio de baja escala que les resultaba suficiente para el bienestar. Sin embargo, su devenir se ve alterado por la llegada de un hombre que les hace ver lo miserables que son por no tener bienes materiales, acceso a la tecnología y sus dispositivos desechables. Así, la comunidad pasa de ser feliz y autosuficiente, a infeliz y aspiracional. Los resultados son que terminarán perdiendo su paraíso, vendido por nada, para convertirse en esclavos de quienes les han revelado su miseria.

Azul contiene los ingredientes que de manera sutil develan lo que es un capitalismo salvaje que ha desplazado a los pueblos originarios ahí donde la riqueza natural, por bella o por valiosa, podía dar un beneficio económico extraordinario.

En palabras del autor Diego Fernando Montoya Serna esos ingredientes se pueden observar…

“Cuando nos cambian. Cuando permitimos que nos cambien. Cuando dejamos de ser nosotros y empezamos a mirarnos en aquello que, vano, se nos hace importante, aunque no lo sea, y le damos sentido de urgencia a lo que es apenas transitorio. Cuando las urgencias ya no son nuestras urgencias, sino aquellas que nos imponen.Cuando nos vemos en lo otro, nos soñamos en los otros. Cuando nos desnaturalizamos.Esa forma de desplazamiento, menos evidente que el geográfico pero más atroz, porque ya no es de un territorio espacial del que somos expulsados sino de un territorio mental, moral, ético, cultural.Todos estamos siendo desplazados.No es un problema de gentes abandonando fincas y casas, es cosa de personas que dejan de ser. Azul habla de un pueblo, ni siquiera eso: de un caserío. Y de sus pocos habitantes. De muy poco habla.  De lo que les ha ocurrido, en forma de interrogación ¿Qué otra cosa puede hacer el teatro sino interrogar e interrogarse?  Azul es una metáfora que podría parecer un pequeño drama local, pero que intenta tocar lo hondo del alma escindida desde la profundidad del mar.”

Azul se presentará durante 8 funciones, los lunes a las 20:30 horas en el Foro El Cubo, ubicado en la calle Lic. Grajales Robles, 28. Colonia Del Valle. 03103 Benito Juárez. CDMX.

Sinopsis

Azul nos cuenta la historia de Segundo y su comunidad costera que tradicionalmente habían vivido de los recursos que la naturaleza les proveía y de un comercio de baja escala que les resulta suficiente para su bienestar. Sin embargo, su devenir se ve alterado por la llegada de un hombre que les hace ver lo miserables que son por no tener bienes materiales, acceso a la tecnología y sus dispositivos desechables. Así, la comunidad pasa de ser feliz y autosuficiente, a infeliz y aspiracional. ¿Los resultados? Tanto Segundo como toda su comunidad terminarán perdiendo su paraíso, vendido por nada, para convertirse en esclavos de quienes les han revelado su miseria y de la añoranza de recuperar lo perdido.